Es crucial que nos detengamos a reflexionar sobre este tema, no solo en el contexto de Chile, sino también a nivel mundial.

Es un honor dirigirnos a ustedes en este día para hablar sobre un tema que merece nuestra atención y acción como comunidad y en este mes a nivel mundial se estableció el día 2 de abril el día de la concienciación del autismo, donde hoy nos reunimos para abordar un tema de gran importancia y sensibilidad: la concienciación sobre el autismo y su impacto en nuestro sistema educativo.

En nuestro país, como en muchas partes del mundo, el autismo ha sido objeto de una mayor atención en los últimos años. Sin embargo, aún enfrentamos desafíos significativos en términos de comprensión, aceptación e inclusión de las personas con autismo en todos los ámbitos de la sociedad, especialmente en el sistema educativo.

¿Pero qué es el autismo?

El autismo es un trastorno del neurodesarrollo, se describe comúnmente como un "espectro" porque afecta a cada individuo de manera diferente y en diferentes grados. Esto significa que las personas con autismo pueden tener una amplia variedad de habilidades, necesidades y características. Algunas personas con autismo pueden tener dificultades significativas en áreas como la comunicación y la interacción social, mientras que otras pueden tener habilidades excepcionales en ciertos campos, como las matemáticas o la música.

A nivel mundial, se estima que alrededor de 1 de cada 160 niños tiene trastorno del espectro autista (TEA), según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y en nuestro Liceo de Prekinder a IV° año medio 106 niños y adolescentes presentan dicho diagnóstico. Este trastorno no conoce fronteras ni discriminaciones, afecta a personas de todas las razas, géneros y clases sociales.

En Chile, la ley de autismo, promulgada en 2018, se convierte en un paso significativo hacia la inclusión y el reconocimiento de los derechos de las personas con TEA. Esta ley establece medidas para garantizar la atención integral de las personas con autismo, así como la promoción de su participación en la sociedad. Sin embargo, aún enfrentamos desafíos importantes, especialmente en el ámbito educativo. Considerando los principios fundamentales:

TRATO DIGNO

AUTONOMÍA

PARTICIPACIÓN Y DIÁLOGO

PERSPECTIVA DE GÉNERO

INTERSECTORIALIDAD

NEURODIVERSIDAD

DETECCIÓN TEMPRANA

SEGUIMIENTO CONTINUO

El sistema educativo chileno tiene la responsabilidad de garantizar una educación inclusiva y de calidad para todos los niños, incluidos aquellos con TEA. Sin embargo, la realidad es que muchas escuelas nos encontramos en proceso de desarrollo para atender las necesidades específicas de estos estudiantes, donde la falta de recursos, capacitación y sensibilización puede llevar a la discriminación.

Para abordar este problema, es fundamental fomentar una cultura de respeto y aceptación dentro de las comunidades educativas, donde se valore la diversidad y se celebre la singularidad de cada persona.

En el contexto de nuestra comunidad educativa pastoral, el compromiso con la inclusión y el apoyo a las personas con TEA adquiere un significado aún más profundo. Como comunidad basada en el sistema preventivo de don Bosco debemos trabajar en valores de amor, compasión y solidaridad, asumiendo toda la responsabilidad de asegurarnos de que todos los miembros sean tratados con dignidad y respeto, haciéndonos partícipes activos como sociedad.

Para lograr esto, es importante sensibilizar a los estudiantes, padres y personal educativo sobre el autismo y sus características. Generando espacios de participación y diálogo en comunidad, garantizando un trato digno a los niños y adolescentes que presentan TEA, con el objetivo de desarrollar y fomentar la autonomía progresiva en sociedad.

En conclusión, la concienciación del autismo es un paso crucial hacia la construcción de una sociedad más inclusiva y equitativa. En Chile, la ley de autismo representa un avance significativo, pero aún queda mucho por hacer, especialmente en el ámbito educativo. Como comunidad educativa pastoral, tenemos la responsabilidad de trabajar juntos para garantizar que todos nuestros estudiantes, incluidos aquellos con autismo, reciban el apoyo y la comprensión que merecen. Siendo agentes de cambio, promoviendo la inclusión y el respeto hacia todas las personas, sin importar sus diferencias. Solo así podremos construir un futuro más equitativo y solidario para todos.

Muchas gracias

Profesoras responsables:

Teresa Valdivia, Constanza Cárcamo, Estefany Muñoz, Karen Nahuelhal, Katherina Arros y Nicole Troncoso